El problema de Bayita

                                                         El problema de Bayita
                                         
          Sientes preocupaciones varias, aquellas que insisten por presentarse y que es como una orden que te acometen a cada instante. Puedes dar mil vueltas, pero no se desprenden de tu cavilar insistente. Es cuestión de conciencia, eso lo sabes, por eso te decides y comienzas a deshilvanar el problema. Haces lo que te apuntaba tu conciencia y... listo, ya estás en campaña. Hay que operar a la perrita amiga, esa que fue recogida de la calle y que ahora la tiene una señora vecina, pero que necesita de otro bolsillo para completar el costo de la intervención que le hará el veterinario. Hablaste por teléfono con alguien que te informó la fecha para llevar al animalito. Es increíble de como se puede salir de una preocupación martillante, la conciencia, ese cariño que tienes hacia los hermanos menores te ha llevado a resolver un problema que aunque no es tuyo, se entiende que lo compartes. Bueno, manos a la obra y a prestar ayuda a Bayita.