LOS NIÑOS DEL MUNDO

A veces no nos damos cuenta de que deberíamos ocuparnos más de los niños, aquellos que por circunstancias especiales son tomados como habitantes sin importancia. No olvidemos que son el futuro del mundo, porque en todos los pueblos hay un niño pobre en la calle, que llora porque sus padres lo abandonaron o porque tienen hambre. No todos los niños tienen la dicha de sentir cada noche al rededor de su cama las buenas noches que pronuncian papá y mamá acompañando con un beso cálido y amoroso. Es una dicha enorme lograr crecer en medio de caricias y cuidados proporcionados por los dos seres que le dieron la vida. Un niño que se lo hiere con palabras o castigos, crece recordando cada paso de su infancia y ese niño cuando se hace mayor no llega a ser feliz del todo porque hay una etapa de su vida en donde aparecen recuerdos tristes, en donde se dieron sueños quebrados. Como una película se sucede en su vida y cuando adulto, ocupa su vida en pensar en sus hijos con la ternura que ha surgido del dolor, entonces llega a ser el padre o la madre más amorosos y responsables, los mejores seres humanos. Quien los ha visto, da fe de ello.